Consecuencias de no hablar con los niños de ciertos temas

¿Cuáles pueden ser las consecuencias de no hablar con los niños de ciertos temas?, Temas complejos de hablar con los niños. ¿Cómo hablar con los niños? Estos interrogantes engloban una serie de artículos para reflexionar sobre al necesidad de las palabras medien las emociones y sensaciones más complejas como el odio, la tristeza, la desesperación, el miedo y la angustia.

En mi despacho me encuentro con numerosos niños que han sido privados de informaciones relevantes sobre sucesos que les atañen. Esta falta de verdad en situaciones que atraviesan, lejos de cumplir el propósito de ahorrarles sufrimiento, puede provocar diversas consecuencias a corto y largo plazo.

Niños que transitan duelos, enfermedades propias o ajenas, divorcio de los padres, necesitan palabras que nombren y den significado a lo que está ocurriendo y que ellos sienten y perciben, aunque a veces sea de un modo inconsciente. La falta de intercambio afectivo y emocional en situaciones difíciles o la respuesta inconsistente con al situación, deja a los niños privados en su posibilidad de elaboración sobre lo que sucede o le sucede. Hacer de cuenta que no pasa nada, cuando pasa y mucho, puede ser profundamente desconcertante para un niño.

Que un niño no pregunte sobre un tema no quiere decir que no haya captado que ocurre algo, sólo que ha captado también de una manera profunda que de eso mejor no hablar, que mamá no lo soportaría, que papá se puede enfadar, y se queda exigido a tramitar en silencio y soledad en favor de proteger a los que más quiere.

No es fácil como padres tener que hablar de situaciones que aún para uno mismo son dolorosas, injustas, incomprensibles. Y de convertirse en un obstáculo duradero insuperable siempre se puede recurrir a pedir ayuda a un profesional. Hay muchas situaciones en la vida que nos generan profundas sensaciones, que nos desconciertan, que ponen a prueba nuestros esquemas mentales, nuestros hábitos y nuestra manera de ver y sentirnos en el mundo.

¿Qué consecuencias genera en los niños no hablar de ciertos temas?

Cada niño privado de explicaciones se ve abocado a transitar las situaciones dolorosas que vive la familia en soledad. La idea de que los niños no se enteran se deshace para quién escucha y observa un niño con sensibilidad.

Luego de escuchar cantidad de niños en terapia infantil puedo resaltar que los niños si se enteran a su manera de las cosas que ocurren y necesitan que sus padres principalmente como figuras fundamentales de amor les hablen sobre los sucesos que les incumben. A veces existe una tía o una abuela con la que hablar de lo que con mamá se hace muy difícil, ayuda, pero nunca es lo mismo. Hablar con los niños puede ser una tarea compleja pero necesaria para que el niño pueda elaborar sus propias emociones al respecto de lo vivido.

¿Que siente un niño al que no se le habla de lo que ocurre?

El niño al que se deja de lado, puede vivir que no importa a su padres lo que él siente o piensa. Puede sentir que sus progenitores no lo aprecian, o no lo consideran con capacidad de entendimiento. Aprende  que esta mal preguntar o que es inadecuado sentir lo que siente. Todas situaciones que lo dejan sólo con su dolor y desconcertado con sus emociones.

Los niños a los que no se les habla sobre lo ocurrido pueden vivir las situaciones como si fuesen consecuencias de sus actos, pensamientos o deseos. Un niño puede sentir que no se le habla por haber sido en parte causante de lo que sucede. Puede parecer extraño para un adulto esta idea, pero desde el pensamiento infantil egocentrico y mágico muchas cosas se interpretan de este modo.

Puede haber ocurrido tal o cual cosa por él haber “pensado mal”, haber deseado en su enfado algún mal que vive con un realismo aplastante consecuencia de su autoria. Por ello, es fundamental transmitir a los niños que lo pensado, fantaseado nunca y de ningún modo modifica la realidad. Ni papá dejó a mamá por portarse muy mal él, ni el abuelo falleció por hacerlo enfadar mucho el otro día...

No dar explicaciones a los niños los deja:

•  Aislados de un sentimiento en común que atraviesa la familia.
• Con la sensación de no ser contenidos adecuados para él, los que deben callarse y nunca mencionar.
• Sin poder compartir sus emociones u opinar sobre la situación que le atañe. Manifestar su enfado, su desilusión, su pena, su extrañeza…
• Con la idea de que no le corresponde saber de ciertas cosas.
• Sabiéndose engañado por las personas que son sus referentes.
• Con la dificultad de tener que entender situaciones complejas en silencio y soledad.
• Sin ser reconocidos como seres independientes, pensantes, con emociones y deseos propios.
• Creando sus propias teorías sobre lo ocurrido. Muchas de las cuales desde su pensamiento infantil, los ubica en el lugar de culpables o responsable de situaciones que nada tienen que ver con ellos.
• Con pocas herramientas para tolerar la frustración, el dolor, la tristeza.
• Menoscabados en algún aspecto de “su” historia que les impide constituir su identidad sobre bases genuinas.
• Limitados a entender el mundo, donde las frustraciones, las pérdidas, las desilusiones no pueden evitarse.